Definición de la perla
Si pudiéramos preguntar ¿Qué eres? a una perla, ella seguramente nos podría responder:
“Vengo del mar limpio y mi nacimiento no fue espontaneo; He sido cuidadosamente recibida en la cavidad y el cuerpo de una ostra, donde con el paso del tiempo fui formándome y cultivándome con el brillo y el resplandor de capas de madreperla, adquiriendo como cualquier ser orgánico y vivo la diferencia única, y la imperfección que caracteriza a la naturaleza.
Nuestra especie, de manera individual o adecuadamente conjuntada, complementa y ayuda a realzar la belleza femenina, aportando distinción, elegancia y serenidad en todos los momentos y en todas las ocasiones.”
Las perlas son las gemas de origen orgánico que tienen mayor grado de utilización en la joyería.
Llamamos perla a cualquier concreción, nacarada o de otra naturaleza, encontrada en diversas especies de moluscos, marinos o de agua dulce. Su origen puede ser natural o cultivado.
Como valorar una perla
Cada perla es única. Descubra los diferentes métodos tradicionalmente utilizados para evaluar el valor de las perlas.
Principios de formación de las perlas
La creación de perlas es un proceso fascinante que requiere mucho tiempo y dedicación. El lecho de ostras es un hábitat natural que debe ser minuciosamente alimentado y preparado antes de que una perla puede ser concebida.
En 1893, después de años de arduos esfuerzos, Kokichi Mikimoto logró duplicar este proceso natural mediante la implantación de un núcleo (núcleo). El método que él desarrolló todavía es utilizado hoy en día por los productores de perlas.
Así una perla cultivada inicia su vida cuando un objeto extraño es introducido en una ostra y no puede ser expulsado de esta.
Para proteger su suave cuerpo del intruso, las células dentro de la ostra segregan una sustancia lisa y dura, llamada nácar, alrededor del objeto irritante.
Después de dos o tres años de depositar capas de nácar alrededor del objeto irritante, si la ostra sobrevive y las condiciones son las correctas, se forma la perla cultivada.
La mayor parte de las perlas que existen en la actualidad en el mercado internacional son perlas cultivadas, es decir, perlas que se obtienen mediante la inserción de un núcleo esférico de nácar (hecho con la concha de otro molusco) en el saco perlífero de una ostra de tres años.
Cuidados
Para alargar la vida y conservar toda la belleza de una perla hay que seguir los siguientes pasos:
a) Guardarlas en su estuche:
Las perlas cultivadas son relativamente blandas en comparación a otras gemas. De modo que es importante mantener las perlas aisladas del resto de joyas para así asegurar que se preservan brillantes y bellas con el paso del tiempo.
b) Tener un estuche adecuado:
Los estuches con interiores en seda, terciopelo o algodón son los más adecuados para su conservación, pues tratan con suavidad la perla además de permitir la transpiración.
c) Evitar ataques químicos:
Los cosméticos, perfumes y lacas para el cabello contienen productos químicos que pueden dañar el lustre de la perla con el paso del tiempo. Incluso las grasas naturales del cuerpo, así como el sudor también pueden dañar la perla.
Es conveniente ponérselas después de haberse aplicado el maquillaje o el perfume. Después de usarlas se deben limpiar con un pañito húmedo para así mantenerlas libres de los residuos dañinos de estos productos. Periódicamente, las perlas deben lavarse con un jabón suave.
d) Evitar cambios bruscos de temperatura y de humedad:
Tanto la sequedad como la humedad extrema son perjudiciales para las perlas. Se debe utilizar el agua dulce para limpiarlas evitando así su deshidratación y pérdida de brillo. Una limpieza rápida con un poco de agua y jabón, con pH neutro, ayudará a su desengrase; el aclarado con agua dulce y secado con un paño suave, ayudarán a recuperar el lustre.
e) Póntelas:
El más importante de todos los cuidados, para que las perlas conserven toda su belleza hay que llevarlas puestas con regularidad. La propia humedad de la piel ayuda a conservar su brillo.
Perlas famosas
1) La peregrina:
La historia de esta famosa perla comienza en 1570 cuando, tras aparecer en aguas de Golfo de Panamá, se subastó en la Casa de las Indias de Sevilla. Felipe II pagó por ella cerca de nueve mil ducados y fue lucida por varias reinas de España, como Isabel Clara Eugenia, Margarita de Austria, Isabel de Borbón y María Luisa de Orleans, algunas de ellas retratadas por Velázquez con la joya. «La Peregrina» permaneció en la Corona española hasta que José I Bonaparte, el hermano de Napoleón que gobernó España durante la ocupación francesa, huyó del país con la famosa perla.
La joya volvió a cambiar de dueño y pasó a manos inglesas cuando los descendientes de José Bonaparte la vendieron al marqués de Abercorn, en cuyas manos permaneció hasta principios del siglo XX. En 1914 la familia Abercorn la vendió a una joyería londinense, que ofreció al rey Alfonso XIII la oportunidad de comprarla, pero el monarca español, preocupado por la inminente guerra mundial, declinó la oferta y «La Peregrina» fue adquirida por un anónimo multimillonario norteamericano. Richard Burton la compró en 1967 por 37 mil dólares (27 mil euros) como regalo a su amada Elizabeth Taylor en su 37 cumpleaños. En el año 2011 volvió a subastarse. La subasta de la Peregrina y de las restantes joyas de Taylor se produjo el día 13 de diciembre de 2011; la perla alcanzó los 9 millones de euros.
2) La perla Hope:
Es una perla de río, de agua dulce y es un verdadero gigante. Pesa 84 gramos, algo así como 450 quilates, y mide 5 centímetros de largo por 12 centímetros de diámetro en su punto más ancho y 9 1/2 centímetros en su punto más angosto. Tiene forma como de un dedal y es blanco puro en el extremo más angosto y se vuelve color bronce verdoso en el lado ancho.
3) Perla “La Rosada”:
La legendaria perla rosada es una perla de Akoya de Australia occidental. Era una perla perfectamente redonda y de color rosado intenso. Supuestamente varias personas han muerto mientras estaban en posesión de la gema.
Existe una maldición que está vinculada a ella, así como al diamante Hope.
El último propietario de la perla la rosada Abraham Dayis murió en Koombana en un barco australiano que se hundió en un ciclón.
Los restos del barco nunca fueron encontrados y se dice que la perla estaba abordo,
Algunas personas afirman que nunca existió.
4) Perla Arco Valley:
La perla más grande del mundo se llama Arco Valley y está en el palacio real de Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos. Es la más grande del mercado, ha pertenecido a emperadores chinos, reyes persas, al nieto de Gengis Kan y, supuestamente, a Marco Polo. Tiene 800 años de antigüedad.
Mide 7,87 centímetros (3,1 pulgadas) de longitud y 575 quilates y lleva el nombre de un propietario anterior de la dinastía familiar del Valle del Arco en Austria, es blanca con un ligero tono azulado, y tonos rosas y crema en sus costados.
Ha sido perforada en tres ocasiones: para que pudiera acoplarse con otras joyas en la tiara de una mujer desconocida, para acompañar un traje mandarín de ceremonias y para ajustarse a una corona o turbante decorado con piedras preciosas propiedad de un rey persa.
Documentos de la corte demuestran que la perla fue propiedad de Kublai Khan, emperador de China en el siglo XIII y nieto de Genguis Khan.
5) La perla “Drexel”:
Se trata de una de las perlas naturales más inusuales que existen, de origen polinesio y lo más probable producto de una ostra “Pinctada Margaritifera”, la Drexel está considerada como una de las más hermosas y raras perlas naturales que se hallan actualmente en existencia debido principalmente a su forma de lágrima delgada y alargada completamente simétrica, su gran tersura, su color gris con visos rosas y un lustre casi perfecto, es de hecho una de las maravillas de la naturaleza al tratarse de una perla producida naturalmente. Tiene un peso de 33,8 qts.
6) La Perla de Asia:
Es de hecho una perla convencional, pero eso sí, la más grande entre las perlas naturales más grandes que existen, tiene un peso de 600 qts., y una data que viene desde finales del siglo XVI y comienzos del siglo XVII.
Como indica su nombre es una perla asiática y se piensa que concretamente es originaria del Golfo Pérsico, el primero en poseerla fue el emperador Mogol Shah Jahan (1628-1658), el mismo que construyera el más famoso símbolo de la India, el Taj Majal.
Es la actual perla nacarada más grande del mundo con 76 x 50 x 28 mm de tamaño y 600 qts de peso.
La forma de la Perla de Asia, de tipo barroco, es bastante inusual a juzgar por las imágenes disponibles de ella diría que su forma es similar a la de una habichuela, pero posee un brillante blanco nacarado con visos plateados y cuyo brillo se ha mantenido incólume pese a los más 400 años que tiene de edad, como la mayoría de las grandes perlas famosas es probable que provenga de una ostra “Pinctada Máxima”.
Cuando el último dueño de la gran perla, el Emperador Chien-lung, el cuarto emperador de la dinastía Qing de China y quien gobernara el imperio por 60 años murió, como correspondía a la tradición fue sepultado con la Perla de Asia, que había sido su joya más preciada y un símbolo de buena suerte y fortuna.